Nunca discutas con un imbécil, te hará descender a su nivel y allí te ganará por experiencia

Si vienes con un problema y no traes la solución, tu eres parte del problema

martes, 9 de julio de 2013

Diario del estío (XII)





La bicha tricéfala
Anoche se me apareció en sueños la bicha. Menudo susto me metió. Un escalofrío me recorrió el cuerpo cuando vi las tres pequeñas cabezas con sus rostros deformes que se acercaban,  riéndose. Como no podía apartarme, pegué un sonoro grito que me despertó, y que a esas horas, se oyó en toda la vecindad. Esto me pasa por hacer el payaso y meterme en camisa de once varas. Unas pocas horas antes había tenido una conversación con un personaje, y el contenido de lo hablado y su interiorización, fueron el origen de la inmunda pesadilla. Se supone que me creí hasta la médula el embuste que me echó, y casi piqué, pero luego, unos cuantos temblores y convulsiones, y todo fuera.
Ya tenemos nuevo alcalde. Le voy a llamar el efímero, porque va a durar menos que un caramelo en la puerta de un colegio, no va a tener tiempo de disfrutar de la poltrona, y seguramente, a la vuelta del verano, tenga sobre la mesa una moción de censura. Ya veremos.
Ha sido curioso el despliegue de sus correligionarios que han acudido a la cita en apoyo. Hasta dos patrullas de picoletos. En sus breves palabras de salutación ha dicho que no estaba seguro de la elección. ¡Ja, que vaya con ese cuento a otro! Se ha puesto a disposición de los vecinos y vecinas, y ha avisado que no esperemos milagros, evidente si viene de un socialista consecuente, cosa que él no es, que se rige más por el interés crematístico en sus movimientos y actuaciones. Seguramente es uno de los mayores proveedores del ayuntamiento, y como es algo tan habitual, hasta esta anomalía ya parece hasta normal.
Prueba de que todo ha sido un camelo, y a pesar de la expectación que ha habido estos días, es que el público asistente al pleno tampoco ha exteriorizado sus sentimientos, y muchos, entre otros yo, hemos vivido el trámite como una pantomima más.